Es posible que te hayas preguntado cómo ajustar el manubrio de una moto. En este artículo veremos algunos aspectos importantes a tener en cuenta a la hora de realizar el ajuste correcto. Una vez que hayas hecho los ajustes necesarios en la postura de tu moto, estarás listo para salir a la carretera. Sigue leyendo para saber más. Además, recuerda que el ajuste de la postura tendrá un efecto significativo en la comodidad del piloto.
En primer lugar, debes comprobar la idoneidad de tu moto. Dependiendo del modelo, es posible que tenga que instalar un adaptador para cambiar la forma del manillar. También es posible que desees sustituir el manillar original por uno personalizado, tipo Protaper. Sin embargo, si piensas hacerlo tú mismo, asegúrate de consultar a un experto en seguridad de motocicletas antes de dar el paso.
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Además, también debes comprobar la altura y el ángulo del manillar. Esto se debe a que algunas motocicletas como las scooters tienen el manillar cubierto. Es fácil ajustar el ángulo del manillar con la ayuda de una llave Allen, pero debes prestar atención a la altura del manillar ya que puede afectar a la visión y al cableado.
¿Cómo ajustar el manubrio de una moto? – Evita accidentes
Si notas un cambio repentino de velocidad, debes ajustar bien la dirección para no tener esa sensación de descontrol o no buen control de la moto. Ten en cuenta los siguientes aspectos al momento de cómo ajustar el manubrio de una moto.
Otro aspecto importante del manillar de la moto es la posibilidad de ajustar el ángulo de las manos del piloto. Además, el manillar de la moto también es ligero, y las vibraciones del suelo se transfieren directamente al cuerpo del piloto. Esto puede causar molestias o dolores musculares latentes en los músculos. Para ello, se puede ajustar el perno y el ángulo de la primera marcha.
El siguiente ajuste importante; es el de los semimanillares del manillar. Mientras que estas piezas pueden fijarse con placas, los semimanillares no originales deben tener collares. Un buen ajuste es importante para evitar una serie de problemas, incluida la pérdida de control. Una vez que hayas ajustado la altura y la inclinación correctas, puedes empezar a trabajar en tu posición de conducción.